
Dos potencias se saludan. Cruzan sus miradas y dialogan al interior de un texto. Uno le da voz al otro y en el medio ya no se sabe quién es el que habla, si Kant, el campeón de la modernidad y precursor del pensamiento contemporáneo, o Heidegger, el retador del tradicionalismo filosófico, el gran pensador de la imposible finitud. Te invito a presenciar esa charla.
Se viene el Grupo de lectura de “Kant y el problema de la metafísica“.
Martes 17:30 hs o de manera asincrónica por YouTube
Estate atento. Empieza pronto, ni bien terminemos de leer “El concepto de tiempo” en ese mismo horario. Nos falta muy poco así que si no estás en ese grupo y te querés sumar, podés anotarte desde ahora mismo:
También podés escribirme directamente por acá:

La primera frase de Kant y el problema de la metafísica anuncia la intención de Heidegger al emprender una nueva interpretación de la obra kantiana fundamental: «La siguiente investigación se propone la tarea de interpretar la Crítica de la razón pura de Kant como una fundamentación de la metafísica». No se trata, pues, de aclarar alguna dificultad, algún malentendido, que obstruya la comprensión de esta obra; por el contrario, Heidegger se propone sacar a luz el contenido decisivo de la Crítica, tratando de exponer lo que Kant «ha querido decir». Y su intención, por arbitraria que pueda parecer, se apoya en una máxima que el mismo Kant quería ver aplicada en toda interpretación filosófica, y que consiste en «reconocer, apartándose de la investigación de la letra, lo que el autor ha querido decir».
Así, Heidegger, disintiendo de los comentaristas habituales que parten del supuesto de que la Crítica de la razón pura es una “teoría del conocimiento” y sólo trata la metafísica y los temas metafísicos en forma accesoria, enfoca el problema de la metafísica «como problema de la ontología fundamental».
